Mi EGO y YO

Hace tiempo, y no sé por qué, me vinieron a la cabeza unas serie de preguntas que todavía hoy me rondan: ¿Somos capaces realmente de preocuparnos por los demás? ¿Hay personas capaces de actuar por pura abnegación?

No cabe duda de que podemos encontrar, casi por cada esquina, personas o acciones puntuales que solemos definir como egoístas; ciertamente es lo más fácil, piensas en ti y en nadie más. Es fabuloso que no te preocupe el hambre en el mundo o el llanto de esa persona que lo único que necesita es hablar; ver que tú estás bien es lo único que necesitas.

Pero por otro lado, hay gente que actúa con total desinterés, poniendo encima de la mesa su sudor, su trabajo e incluso su vida con tal de ayudar a los demás (o eso es lo que pensamos), como por ejemplo la persona que trabaja para una ONG, el sacerdote que va de misiones o simplemente el niño que ayuda a su madre a hacer la compra a pesar de no tener ganas.

Bien, pues yo me vuelvo a preguntar: ¿Son estas acciones generosas? ¿Podemos afirmar que haciendo esos esfuerzos estamos pensando únicamente en los demás? Yo no lo dudo, pero tampoco lo dejo de dudar. Mi teoría es que si tomas una decisión, ya estás anteponiéndo tu voluntad, aunque creas que haces el bien para los demás y no para ti mismo. La persona que trabaja para la ONG ha decidido hacerlo, lo que indica voluntad, SU voluntad. A pesar de que ayude a los demás, los ayuda porque él o ella lo ha decidido, ¿por qué? quizá porque piensa que eso es lo que está bien, lo que supone que se sienta cómodo consigo mismo. A largo plazo todas las acciones son egoístas, porque una acción indica voluntad.

¿Y la persona que tiene amigos? Se supone que la gran mayoría de la gente tiene amigos, pues bien, ¿por qué decidimos que nuestros amigos son tales? ¿Quizá porque necesitan de nosotros? ¿O tal vez porque nosotros disfrutamos con ellos? Nos sentimos bien en su compañía y tenemos cosas en común con ellos, y sólo por eso les llamamos "amigos". Y si uno de ellos necesita nuestra ayuda y se la damos, ¿por qué lo hacemos? ¿por desinterés o por no perder a una persona de la que nos podemos aprovechar en un futuro? ¿buscamos su mejora o pensamos inconscientemente que "él haría lo mismo"? Si no lo hiciera, ¿lo haríamos nosotros? Y si le acabamos ayudando, ¿por qué lo hacemos? Pues para verle feliz, lo que nos convierte a nosotros en personas felices; es decir, el último fin es nuestras felicidad.

Pongámonos en el peor de los casos:

Estás con una persona, la que más quieres en el mundo, y por lo que sea debes decidir la muerte de uno de vosotros dos. ¿Es posible tomar una decisión no egoísta? Si decides que muera la otra persona ya estás siendo egoísta, pero si decides morir tú ¿por qué lo haces? Pues lo haces porque TÚ prefieres que él o ella viva, incluso aunque tú debas morir; pero la decisión la sigues tomando tú. Y es más, si decides no decidir ya estás decidiendo por lo que sigues siendo egoísta. Y esto me lleva a mi última pregunta, ¿Podemos no ser egoístas?

Pensándolo friamente, es posible que no.