¿Dios? (1ª Parte)

Hace unos días y con motivo de la Semana Santa, mantuvimos mis amigos y yo una profunda a la vez que extensa conversación acerca de la que considero la madre de todas las preguntas: ¿Hay algo después de la muerte? ¿Existe Dios? La pregunta en sí tiene tela marinera. Tanto es así que, se pongan como se pongan unos u otros, es imposible contestarla con certeza. ¿En qué nos basamos entonces para afirmar o negar la existencia de un Ser Todopoderoso?

En realidad, no hace falta ser cura para defender la existencia de un Ser Superior, ni ser científico para no hacerlo, pero tanto el uno como el otro basan su respuesta en su propio raciocinio y sobre todo en su educación. Ahora, mi pregunta es ¿Quién de los dos tiene razón? Porque, siendo honestos, sólo uno puede tenerla. Un científico te dirá que es imposible demostrar la existencia de Dios y un cura te dirá que Dios está por encima de toda ciencia. Y esto, ¿a qué nos lleva? Pues desgraciadamente, amigos míos, a lo mismo; a nada.

Personalmente me considero una persona creyente, creyente de Dios. Sé que la frase "creo en Dios, pero no en la iglesia" está ya bastante manida, pero es real. Todos sabemos que a lo largo de la historia, la iglesia ha hecho un enorme daño a la humanidad y sinceramente, considero imposible que los seres humanos, imperfectos todos, hayan sido capaces de comunicar generación tras generación la historia de Jesús hasta nuestros días sin ningún tipo de cambio que beneficie a alguien, y no me gusta señalar (Iglesia), pero también es cierto que no tienes que hacer caso de todo lo que dicen los curas, obispos y demás para creer en un Ser perfecto que nos acogerá en su seno el día de mañana, o de pasado.

Si me preguntáis que por qué creo en Dios no podré daros mayor explicación que la de haber sido educado en una Sociedad Cristiana, pero también es cierto que me niego a creer que cuando falte, simplemente me comerán los gusanos, y que ciertas personas (por llamarlas de alguna forma) tendrán el mismo destino que yo.

Yo digo que si un cura no es capaz de demostrar la existencia de Dios, un científico tampoco lo es de demostrar lo contrario. Por muchos razonamientos matemáticos o históricos que sea capaz de darte, nunca podrá estar por encima de Dios, si es que existe. Una vez aprendí en una clase de filosofía que las cosas no son reales, sino verosímiles, y que si en realidad lo son nunca llegaremos a saberlo con certeza. Pues lo mismo pasa con Dios, nunca podremos saber si es real o no su existencia hasta que experimentemos la muerte, y aún así...

La razón de que nos planteemos si existe un Ser Superior no es otra que nuestro propio egocentrismo. El ser humano no es capaz de comprender el origen de la vida, y como él no es capaz de crearla sin partir de otro ser vivo, es decir, de la nada, tiende a creer en la existencia de Dios. Un creyente te dirá que fue Dios el que creó ese primer átomo de vida, en cambio un científico te dirá que hace megacientosmil millones de años se dieron las perfectas y puñeteras circunstancias para el origen de la vida, vamos, que nos tocó la lotería cincuenta y siete veces seguidas y sin comprar boleto. Bien, ¿Qué es más plausible? ¿Que un Ser Superior, que nadie ha visto nunca, nos creara a partir de la nada? ¿O que hayamos tenido una suerte que como mínimo podríamos denominar esperpéntica?

Allá tú con tu fe.